Permiso

Hoy Me permito sumergirme en las profundidades de mi ser, no hay segundos más dorados que aquellos en los que somos capaces de avistarnos. 

Fuertes y contundentes, somos los mismos que extrañamos, los mismos que miramos al Cielo, somos la estrella que se niega a abandonarse.

Sutil grandeza, sentir con todo el ser, con la piel, la mente y el corazón, sueños prestados a la razón, coherencia que se fue a viajar... 

Pedacito de suspiro dónde nos escampamos. Vamos a librarlo todo, te vine a escuchar... me vine a abrazar, tanto por levitar en mi cabeza. 

Extraño cantar y tararear canciones de cuna en días para despertar a la complejidad.

Hay algunas ruinas de amores olvidados que hace falta barrer con los oídos y trapear con los ojos cristalinos.

Vine a escuchar mi melancolía, mi alegría y mi serenidad al tiempo, como quisiera volver a abrazar unos momentos de euforia que en verdad debo curar de fantasía. 

El amor parece una cosa sencilla en las canciones, es como navegar quizá... Particular extrañeza que mi corazón hoy sea mecido por sus propias tormentas... tanto que soñé, tanto que quise, tanto que imaginé...

Quiero darme permiso de crear más de lo que se ve, más de lo qude se va.. 

¿Y si me digo que sí, una vez más? Mis ojos luz frente al espejo una vez más, ríos que los cruzan de vez en cuando no deben siempre opacarlos.

Amor en la melodía, música en la voz... todo tan complejo y simple, como la corriente de los mares. Me atraviesan siempre los suspiros de lo que se fue, de lo que no fue y del propio amor que anhela llevarse sin miedo a aondar. 

¿Y si me digo que sí? ¿correr el riesgo de llevarme a años luz de aquí? mente enamorada solo de estaciones, mente que se inquietan por volver a a sentir. 

Gracias por el amor y el desamor, si me ánima a volver, me imagino sonriendo hasta pasarnos de renglón.