Helicópteros

¿Quién puede dormir así?

¿Quién puede simplemente borrar la verdad y mirar hacia el otro lado?

¿Quién puede juzgar ahora el temor o la rabia?

Siempre ha parecido un insulto pasar la página mientras otros se apagan... 

Cómo ignorar que mientras tienes un lugar y una cama caliente escuchas pasar los helicópteros que quizá sean solo mensajeros de guerra... 

Dolía cada vida al principio de la pandemia... Las empezamos a borrar cuándo preferimos nuestra cotidianidad a cambiar por amor... ¿Y ahora? Ahora que podemos ser testigos de una guerra que siempre ha existido... Ahora nos duelen los muertos pero a la vez los olvidamos rápido para poder caminar...

NO, no me acostumbró... No lo podemos hacer... Duele hoy y seguirá doliendo mañana... Que la noche nos sirva solo para poder hacer de nosotros un mundo que no siembra minas... Un universo que es claro y crítico pero que jamás anula al otro... Duele vernos cómo una veleta... Duele ver como nos acomodan como fichas en el juego, como títeres en nuestro propio teatro...

Este silencio absurdo agobia y estas palabras deben salir en honor de quienes hemos ignorado todos estos años y de quienes hoy han sufrido la crueldad frente a nuestros ojos, por todo eso que no podemos cambiar... Pero también por todo eso que estamos en la obligación de construir... Y si, sí debemos sentir el dolor por todas esas veces que fuimos indiferentes...

Por todas las veces que no hemos hecho el cambio, por todas las veces que no amamos, por las veces que no votamos, por los líderes que nunca conocimos, por cada mirada en este mundo que se cerró y de la que nunca supimos, de la que nunca pudimos hacer nada... 

Vete rápido noche, huye esta vez, que la lluvia nos inunde por esta vez, que se aparte todo, que llueva a cántaros y nos salve la vida, que llueva mares para que las balas tengan miedo de salir y seamos solo los hermanos que por una etiqueta de bandos se separaron pero que pueden estar hechos del mismo material, que no se escapé el perdón el espíritu, ni el afecto.

No podemos ser el himno de una guerra que otros armaron y que ellos jamás van a pelear...